Mutable – Fuego - Masculino
Palabras Claves: ¨ YO VEO ¨ aspiración, amor a la libertad y la exploración. Como el benéfico Júpiter rige al signo, siempre aparece la ayuda cuando esta es necesaria. Es un signo que representa la honestidad y la conducta correcta, aman la libertad.
Planeta Dominante: regido por el planeta Júpiter (Benéfico Mayor)
Exaltación: Nodo Sur
Detrimento: Mercurio
Caída: Nodo Norte - Urano
Grados Críticos: 4 - 17
Grado Azimene: 1 -7 – 8 -18 -19
Definición de Azimene: Se dice de un planeta posicionado en un grado débil dentro de un signo.
Cosignificante de la Casa: Casa IX
Simbolismo: El Arquero es el Fuego de los brazos, que tiende a ligar, a mezclar y a fundir, es el Fuego espiritual que enlaza y mezcla las plantas que descompuso el signo de Escorpio
Cualidades: extroversión, lanzamiento vital, ardor, optimismo, saber, religiosidad, legalidad, intuición, filosofía, sensatez, clarividencia, gusto por los viajes, independencia, coraje.
Defectos: agitación, temeridad, simpleza, fácilmente entusiasmable, deseo de aventura, amor sin propósito por lo exótico, elasticidad moral, ligereza.
Dominancia Psicológica: para comprender a un individuo de Sagitario, es necesario recordar su símbolo: un centauro con las patas y el cuerpo de caballo (entonces un animal) tiene en la parte superior un torso de hombre que es firme al lanzar un dardo hacia el cielo; es decir, el hombre que vive en la bestialidad de la materia y está en el punto de liberarse con la fuerza de su pensamiento hacia las más altas metas espirituales. La personalidad del tipo Sagitario, lleva a proyectarse en la realidad intentando liberarse de las cadenas de lo material para conquistar una dimensión más elevada. El Fuego de Sagitario es la brasa que no da luz y no quema, pero calienta. Aries busca la inmediatez, Sagitario busca la espiritualidad; lo que desea es formar parte de la realidad para mejorarla, pero si el hecho de formar parte de la realidad se convierte en un obstáculo, tratará de eludirla. El Sagitario es un sujeto idealista que se da completa y fogosamente en el nombre de un ideal.
Cuerpo físico: Gobierna: la circulación sanguínea, las caderas, muslos, parte superior de las piernas y el hígado.
El glifo: una flecha donde la inclinación indica la partida desde un punto inferior para alcanzar un blanco puesto en alto (hacia el Capricornio).
Caracteristicas generales del Signo
Los nacidos bajo este signo poseen una doble y mutable naturaleza representada, o por la simbología estacional, que indica el paso de una estación a otra, o por la figura mitológica, mitad hombre y mitad caballo. El Sagitario está dominado por el deseo de cambio para conquistar situaciones siempre distintas y vivirlas con alegría.Las disposiciones extremas de este signo doble son muy acentuadas: Si el tema es armónico en su carta natal, el sujeto tiende hacia un conformismo confortable; adaptado, asimila las buenas maneras, se conforma a las costumbres establecidas, es partidario de la legalidad, del orden y las convenciones sociales, es un ser abierto, eufórico, que se sabe móver, recto, leal, caballeroso, amante del prestigio y la honorabilidad. Si el tema es disonante en su carta natal, tiende a la independencia extravagante, a la rebelión. Instintivamente, se levanta contra las reglas de su medio y se comporta como un inadaptado que rompe las ataduras. Su necesidad de emancipación domina ante todo. Voluntad insurreccional contra las costumbres, lugares comunes y prejuicios; pasiones imperiosas, impulsos audaces, coces fogosas de un pura sangre...Según como se expresa en su entorno: Si es extrovertido, tiende a la aventura en su relación con el mundo; es un atleta, un deportista, un temperamento nómada, que ante todo posee la pasión por los viajes, expíorador a la búsqueda de nuevos horizontes, llevado siempre hacia un más allá... Si es introvertido, lo que domina es la aventura hacia el encuentro de sí mismo, buscando este más allá al que aspira en su interior, en el anhelo de formas morales y espirituales mas elevadas. Su impulso se dirige hacia el conocimiento, la cultura, la religión, la perfección de sí mismo; apunta hacia un ideal, una sabiduría al final de su viaje interior. Su inquietud le lleva a desear expansionarse, evadirse no físicamente de su propia familia, de su ambiente y, a menudo, de la patria, también a desear elevarse espiritualmente, trascender su propia subjetividad y conseguir un alto nivel de espiritualidad. Sólo la carta natal puede revelar la orientación que tomará su personalidad. Cuando los aspectos son en su mayor parte armonicos, conforma individuos respetuosos de las reglas con un comportamiento fundamentalmente honesto y sereno, siempre a la búsqueda de ambientes confortables y seguros. La inteligencia puede ser, en estos casos, un poco ingenua y dirigida hacia lo novedoso, pero sin la fuerza revolucionaria de Escorpio. Sagitario de este tipo es un exuberante, un entusiasta dispuesto a cambiar de lugar y de acción, amante de la aventura, de los deportes, de los viajes, sobre todo a países lejanos, donde el contacto con razas y culturas distintas satisface su sed de novedad. Este signo corresponde a la novena casa del Zodíaco, que representa el desapego del ambiente inmediato (representado por su casa opuesta, la tercera) y la aspiración hacia horizontes más amplios tanto físicos como mentales. A pesar de su inquietud, Sagitario es básicamente un individuo respetuoso de las convenciones y costumbres sociales, que pondera en su medida tanto el prestigio como la respetabilidad. Sólo con posiciones fuertemente disonantes de Júpiter pueden aparecer sujetos rebeldes, desordenados y sin claridad de ideas. Pero en general los sagitarianos son personas joviales, serenas, que pretenden conseguir sus objetivos con ideas innovadoras, pero no demasiado revolucionarias o destructivas. Cuando los dos elementos opuestos del signo, lo animal y lo espiritual, consiguen fundirse equilibradamente, dan individuos completos, ya que todos los componentes del ser humano están armónicamente representados y realizados. En este signo pueden encontrarse sujetos, que, por posibilidad de síntesis del dualismo inherente en la naturaleza humana, pueden representar mejor que los demás al hombre en su compleja realidad.
La mujer del signo. Como el hombre, puede tender a una vida «irregular», pero al mismo tiempo desea la seguridad. En el campo afectivo busca a un compañero de nivel superior al suyo, que le posibilite mejorar su propia condición social, pero, si en la sagitariana prevalece la tendencia a la evolución interior, puede realizarse a través de la completa emancipación o incluso por dedicación a una causa superior.
Tercero y último de los signos de Fuego, compartirá con Aries y Leo el optimismo, la calidez, la confianza en si mismo y en la vida, pero por pertenecer a la modalidad mutable, carece de la vibración chisporroteante de las llamas encendidas. Más bien semeja el fuego de las brasas, que si se lo aviva vuelve a prenderse y si no permanece dando apenas un poco de calor.
Si asociamos los signos de fuego con las castas o clases poderosas de diferentes culturas, podríamos atribuir a Aries (cardinal) la de los guerreros; a Leo (fijo), la de los aristócratas y a Sagitario (mutable) la de los sacerdotes. Los primeros conquistan, los segundos gobiernan, los terceros son los intermediarios entre los hombres y los dioses.
Si lo relacionamos con su opuesto, veremos que mientras en Géminis la atención se centra en ejercitar el lenguaje, en preguntar, en tratar de captar y conocer el mundo circundante, en Sagitario, por el contrario, se buscan respuestas amplias y abarcativas, que den cuenta de las diferentes problemáticas humanas: el para qué y el hacia dónde de la vida.
Como signo posterior a Escorpio le corresponde encontrar un sentido, una nueva mirada, un cambio de perspectiva luego de la crisis.
La flecha que lo simboliza grafica la posibilidad que, a través del conocimiento, el hombre vuele hacia su transformación, transmute su ser animal en ser espiritual.
Originalmente, el símbolo de Sagitario es un centauro con un arco tensado. Este ser mitológico, mitad caballo, mitad humano, señala la amenaza de tornarse bestia cuando no se equilibran los instintos con el poder espiritual. El jinete, por el contrario, demuestra al hombre que ha domado a la bestia. La imagen de San Jorge con el dragón es una de las tantas maneras en que se ha planteado la necesidad de dominar la bestia interior.
El arco y la flecha, no sólo cumplen funciones para los cazadores y como arma de los caballeros, sino que también denota un ejercicio espiritual en algunos rituales de purificación.
El tiro con arco es una disciplina esencial en el Oriente. La flecha, como relámpago o rayo solar, es el trozo de luz que atraviesa las tinieblas de la ignorancia, convirtiéndose en símbolo del conocimiento. El guerrero de corazón puro da en el blanco en el primer intento, en tanto no es él quien dispara sino que su interior se identifica con el ritmo de los cielos y del universo que guían a la flecha para clavarse en el centro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario